Las relaciones humanas son un capítulo difícil de entender. Cada persona es un mundo aparte, por esto, cuesta mantener la armonía. Tenemos la oportunidad y el privilegio de escoger amigos y pareja, otro tipo de relaciones, nos tocan por suerte. La convivencia descubre personas que en otro contexto seguramente no habríamos seleccionado, de manera que creamos vínculos porque participamos del mismo entorno o practicamos similar actividad. Estas circunstancias llevan a tener amigos con costumbres diferentes y sucede que en la medida que aumenta la frecuencia, las diversidades se hagan más evidentes. La circunstancias o casualidades se dan espontáneamente, la creación del vínculo se decide. En estos casos, parte de la decisión, nace de la sensación de compartir los mismo valores como son la honestidad, la lealtad y el respeto.
Inicio y concluyo una relación de manera semejante, exponiendo las razones y dejando puertas abiertas. Para algunos , pasa desapercibido, el dejar un vínculo en suspenso, sin explicación.
Bien vale la pena recordar, el evitar hacer a otros lo que nos hace disgustar o sufrir.
DIANA NEIRA
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